¡Feliz luna de miel con tu bebé!

¿Recuerdas lo maravilloso que es estar recién enamorada? Pasar el día entero con tu pareja, no salir de la cama o estar un rato en la terraza abrazados, leyendo o charlando y disfrutar simplemente de la proximidad del otro. Es un período en el que dos personas se acercan mucho y es muy importante porque constituye el fundamento de una relación.

Generar un vínculo con una persona requiere tiempo. Las relaciones crecen cada día que pasa y con cada momento vivido en común. Es importante tomarse un tiempo para dedicar exclusivamente al otro y olvidar todo lo demás: unos momentos sin el teléfono, las citas o los e-mails para relajaros en la “isla de vuestra relación de pareja”. Estos momentos en la isla resguardada son increíblemente intensos e importantes como fundamento de una relación estable. Es estupendo que también puedas crear una isla así para ti y para tu hijo en los primeros momentos que paséis juntos. Con el parto da comienzo una nueva fase vital y sería maravilloso que los padres primerizos no tuvieran nada más que hacer que mirar juntos a ese pequeño, contemplarlo mientras duerme, cambiarle los pañales, estar en contacto piel con piel y disfrutar de cada momento con él. Precisamente el comienzo de la vida es también el período en que el amor puede surgir y crecer y en el que puedes conocer por vez primera la personalidad de ese pequeño ser humano. Reserva un espacio en tu vida para crear esa isla tan especial.

Habla en las próximas semanas con tu familia y amigos y pídeles su apoyo para el período del puerperio. ¿A quién le apetece cocinar de vez en cuando una sopa o dejar preparada una lasaña que sólo tengas que meter en el horno? ¿Podría encargarse tu suegro de hacer la compra o algunos recados? Tú también puedes cocinar algo con antelación para estar bien provista durante dos o tres semanas. Las visitas se pueden dejar para después, puedes grabar un breve mensaje en el contestador o avisar a tu entorno más cercano que la nueva personita ya ha llegado al mundo, que estás en plena luna de miel con ella, que agradeces las felicitaciones y que devolverás la llamada más adelante. Puede que tu pareja se proponga arreglar el jardín durante el puerperio o sacar por fin los trastos del desván, quizá eso se pueda aplazar para que podáis disfrutar de vuestra nueva situación los tres juntos sin tener que ocuparos de tareas adicionales. Si el bebé tiene hermanos pequeños integradlos en la luna de miel porque es importante que surja amor y se cree un estrecho vínculo entre hermanos. Puede que durante ese tiempo también cambies un poco sus rutinas: es posible que algunos días una madre amiga te ayude llevándoles a la guardería o que una estudiante de la vecindad les saque al parque, así tendrás algo de tiempo para estar a solas con tu bebé.