Te cuesta más andar

Se habla de “fase de sobrecarga” para referirse al último tercio del embarazo. Es muy probable que en las próximas cuatro o seis semanas aumenten las molestias propias de la gestación.

Te cuesta más andar, los pies se hinchan, tienes dificultades para dormir, ¿te duele la espalda? Todo eso son molestias propias del embarazo. Se las denomina molestias porque son muy diferentes de los síntomas patológicos. Las molestias tienen su origen en el máximo aprovechamiento de la capacidad de rendimiento de tu organismo. Cuando algo te resulta molesto, sientes espontáneamente el impulso de actuar de otra manera para fatigarte menos y respaldar a tu cuerpo a la hora de afrontar esta intensa tarea.

Si ahora te cuesta andar eso es debido a la capacidad de adaptación de la pelvis ósea a la cabecita o a las nalgas del bebé. Tu sínfisis (la unión entre los huesos del pubis) se afloja por acción de las hormonas al igual que las uniones del coxis (la última parte de tu columna vertebral), a fin de poder ceder ante la presión del parto. Así la pelvis puede dilatarse un poco al final del embarazo y en el momento del parto. De este modo el coxis, normalmente rígido, se vuelve más flexible. Si puedes, escucha a tu cuerpo y haz más pausas de lo habitual o por ejemplo pon las piernas en alto a mediodía. Haz justo lo que te siente bien, que es diferente para cada mujer, y no olvides que, a pesar de todas estas molestias, hay un motivo muy importante para alegrarse. Tu cuerpo hace maravillas y se va preparando lentamente, por sí solo y a todos los niveles, para el momento del parto.

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